La arquitectura del turismo
El turismo se ha convertido en los últimos años en un sector de gran potencia. La mayoría de los países invierten mucho dinero en mejorar este servicio y ofrecer a los turistas una experiencia que nunca olvidarán. Junto con las vivencias del turista en el destino turístico, encontramos el arte del alojamiento. ¿A que lo primero que pensamos cuando decidimos nuestro destino es el hotel?
Los hoteles son la base de la arquitectura del turismo.
¿Quién no ha querido alguna vez dormir en un hotel de lujo? Simplemente por disfrutar de unas comodidades y una decoración que nos hace sentir especiales, diferentes.
Es una forma de salir de la rutina, de avivar nuestro deseo de vivir en un espacio confortable, bonito y especial.
Pero los hoteles no son sólo habitaciones donde pasar una noche. Los hoteles son un arte, un lugar que ofrece estilo y personalidad. Hace unos años encontrábamos hoteles con funciones convencionales pero de estilos para todo el mundo. Los había con encanto, románticos, coloridos, clásicos, etc. Se buscaba fundamentalmente que el cliente estuviese cómodo, que sintiera el hotel como un segundo hogar.
Innovación forzada de los hoteles
Como todo en la sociedad, debemos estar en una continua adaptación para no quedarnos apartados. Con los hoteles ocurrió lo mismo. Surgieron nuevos servicios que satisfacían la necesidad de alojamiento de los turistas. Uno de ellos muy famoso es el alquiler de apartamentos propios por días. El coste por noche en estos apartamentos es claramente menor que en los hoteles. Y hoy en día en el que el precio es fundamental, los hoteles se han visto afectados por esta nueva práctica.
¿Qué debemos hacer continuamente para seguir en nuestro mercado? Innovar. Ya no importaba tanto la arquitectura de los hoteles o su estilo. Éstos debían encontrar una manera de ofrecer algo más que un alojamiento, un lugar donde dormir.
Nuevas experiencias hoteleras
Actualmente podemos ver hoteles que ofrecen algo más allá que dormir o comer, ofrecen una experiencia viva. Una apuesta fuerte es la conexión con la naturaleza. Encontramos hoteles con habitaciones en acantilados, en aviones ya retirados, en medio de un bosque, con habitaciones hechas de cristal para mirar las estrellas e incluso rodeadas de un acuario inmenso.
Los turistas buscan hoteles con encanto, originales y que ofrezcan una nueva forma de dormir. Algo que en sus propias casas fuera impensable que pudiera ocurrir. Ya no sólo será dormir fuera de casa, ya será el poder descansar en una habitación tan particular que jamás pensaríamos que podría existir.
Un reto para la arquitectura
¿Cómo diseñar habitaciones para que se mantengan en un acantilado? Cada día surgen ideas nuevas, conceptos innovadores en los hoteles donde la arquitectura es la responsable de que tal sueño se cumpla.
Es un reto al que muchos arquitectos están dispuestos a superar. A esas estructuras que a primera vista se ven imposibles, se les suma un diseño espectacular. Un ejemplo son los hoteles con habitaciones temáticas, con temas que nos pueden llamar mucho la atención como los superhéroes.
Cada día que pasa vemos que la arquitectura tiene menos límites, que podemos crear y diseñar a nuestro antojo. Y sobre todo crear y diseñar para nuestros clientes, esos turistas que buscan nuevas experiencias. Emprender es la base de la arquitectura del turismo.
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